Contra la "política climática radical": California probablemente tendrá que levantar la prohibición de los motores de combustión de 2035

El estado norteamericano de California tiene tradicionalmente una legislación ecológica especialmente estricta, también en lo referente al tráfico por carretera. Esto se remonta a la década de 1980, cuando áreas metropolitanas como Los Ángeles todavía estaban regularmente cubiertas por una espesa nube de smog. Desde la década de 1970 se han introducido en California regulaciones estrictas sobre emisiones que han sido adoptadas por muchos otros estados.

Sin embargo, ahora los coches son mucho más limpios. Sin embargo, California aún tiene ciertos derechos especiales y los lobbystas en favor de los coches eléctricos tienen gran influencia sobre el gobierno allí. Poco antes de que el expresidente estadounidense Joe Biden dejara el cargo, el gobernador de California, Gavin Newsom, obtuvo el derecho a través de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de prohibir a todos los californianos comprar vehículos de gasolina, diésel e híbridos a partir de 2035.

Al igual que en la UE, todos los coches nuevos no eléctricos quedarían prohibidos en 10 años. California es el mayor mercado individual de Estados Unidos para la industria automotriz y, por lo tanto, tiene una gran influencia en todo el mercado del país. Así comenzó la marcha triunfal de Tesla en California.

Pero ahora la prohibición de los motores de combustión podría volver a derrumbarse. Según informes de medios estadounidenses , la Cámara de Representantes de Estados Unidos revocó el privilegio de prohibición que Biden había otorgado rápidamente a su colega de partido Newsom. Sorprendentemente, 35 demócratas también votaron a favor de la moción presentada por los republicanos; según Fox News, incluso dos representantes de California.

Los republicanos están cumpliendo así la promesa de que las políticas climáticas de la administración anterior, con prohibiciones, impuestos al CO2 y otras medidas, deben cancelarse en la medida de lo posible. El presidente de Estados Unidos, Trump, ha descartado constantemente los subsidios federales para vehículos eléctricos y ha enfatizado que su administración dejará en manos de las personas la elección si quieren conducir un motor de combustión o un auto eléctrico.

El representante republicano Steve Scalise criticó una "política climática radical" que habría obligado a los estadounidenses a utilizar coches eléctricos en el futuro y los habría privado de su libre elección de compra. De hecho, una política de prohibición como la de la UE se considera errónea en Estados Unidos, incluso por muchos políticos de izquierda y verdes. Los críticos de la nueva resolución, sin embargo, enfatizaron que sin la prohibición, los objetivos climáticos de California estarían en peligro.

El gobernador Gavon Newsom dijo a CBS News que las políticas de su estado apuntan a mantener el aire limpio. Hasta ahora esto "no ha sido político" y los republicanos han sido "comprados por una maquinaria de propaganda de derecha". Newsom quiere seguir luchando por la obligatoriedad de los coches eléctricos en su estado. De hecho, es legalmente controvertido hasta qué punto los poderes de California pueden verse socavados o revisados ​​por decisiones a nivel federal. Los observadores ahora esperan una larga batalla legal.